Dentro de un mes estará en librerías una novela que he escrito llena, llenita de lesbianas. Como mi poemario. ¿Por qué no escribes algo que le guste… a más gente?, me preguntó una vez mi padre.
Bueno, sería ideal que lo mismo que yo llevo toda la puta vida leyendo a escritoras heteros sin que me haya pasado nada, es más, muchas veces disfrutando y apasionándome con sus historias, la gente se acercara a textos creados por lesbianas. Pero vaya, que me da exactamente igual.
Que yo escribo y me pongo camisas de cuadros y sujetadores de encaje y voy por la vida con mi pelazo y mis michelines y mi luz y mi oscuridad y mi trabajo y mi activismo y mi amor… por y para las MUJERES LESBIANAS.
Infinitamente en deuda con todas mis madres sáficas, gracias a quienes estoy hoy aquí mostrándome sin miedo, prometo usar siempre todos mis privilegios (vivir donde vivo, tener la familia que tengo, haber gozado de acceso a una educación y otros recursos) al servicio de todas las hermanas que no han tenido mi suerte.
Visibilidad lésbica, siempre.
Que viva el rollo bollo y punto.
Día de la Visibilidad Lésbica 2022
